Francisco Berlanga es el imaginero de todas nuestras imágenes.
Francisco Berlanga de Ávila nace en Sevilla en 1958. Cursa sus estudios en la Escuela de Artes y Oficios de Sevilla. Desde 1972 cursa el primero de comunes y 2º, 3º y 4º del plan antiguo, modelando talla de madera y piedra, además de dibujo estatuario. De 1973 a 1979 cursa estudios en la Escuela de Dorado y Policromía, siendo su profesor Carlos Bravo Nogales (sus obras más conocidas son San Juan Bosco y María Auxiliadora, en Sevilla).
En 1979 deja a Carlos Bravo y se pone a trabajar con Francisco Buiza Fernández, conocido imaginero sevillano. Con él, su trabajo comienza a ser firme. Fallece en el 1983, siendo sus obras mas conocidas en Sevilla el Santísimo Cristo de la Sangre (San Benito) y decoración del mismo paso, paso de Misterio de la Cigarrera, decoración del paso de la Presentación del Pueblo y el paso del Resucitado de la semana Sevillana. Tras su muerte, el taller pasa a manos de Francisco Berlanga de Ávila.
Berlanga es un entusiasta admirador de su profesor y maestro de la imaginería Buiza, del que dice haber aprendido mucho del arte de la talla de imagines considerándole uno de los escultores imagineros mejores de nuestro tiempo.
En la actualidad seria difícil enumerar los trabajos realizados por nuestra Geografía.
En más de una ocasión, en nuestras visitas a la capital andaluza para ver el desarrollo de la imagen del Santísimo Cristo de las Tres Caídas, le preguntamos como podía hacer esas maravillas con las manos, y si algo hay que destacar es la respuesta que siempre daba a cualquier persona que por su taller se acercaba: “intento que éstas tengan alma, y sobre este cristo sólo trabajo cuando él me llama”.